Mi experiencia con el Japa Mala

Melisa una querida co.inspiradora comparte con nosotras esta inspiradora experiencia:

"Estaba en mi último trimestre de mi último dragón, preparándome para un parto en casa en plena pandemia. Practiqué todo lo que había aprendido en mi vida entera para mantenerme en serenidad y atender este proceso de manera consciente.

Es ahí cuando busqué la ayuda de una japa mala. Estos collares con 108 cuentas se utilizan en culturas orientales para meditar y sostener la calma, repitiendo una oración o mantra. Parecido a la función de un rosario, las malas nos mantienen conectadas con lo que sucede a nuestro alrededor. Otorgan el bienestar que acompaña estar presentes en el momento pleno.

Yo compré el mala urbano: introspección de Lalita Devi. Con unas hermosas tonalidades turquesa, me dije: “ya estás lista para lograr tu meta de parir en casa”.

Mi parto duró casi 50 horas, en compañía de la brava Michelle Pérez Chiqués como partera, Zayelit Budet como doula y Jessica Galarza como partera aprendiz. Agradezco el valor que me sigue brindando el equipo de Centro MAM en estos momentos.

Melisa Mia Vargas

Recuerdo que comencé el parto muda. Había cambiado la palabra contracción por marea para que fuera agradable a mi cerebro y me apoyé de aceites esenciales, inciensos y mi japa mala. Bailé, caminé, brinqué en la bola suiza, hice hipnosis, ejercicios, estuve en la piscina de parto y terminé pariendo en cuclillas como toda una taína.
La frase que me repetía fue: "Te mereces parir en paz". Estoy segura de que al menos mil veces la repetí. Me sigo mereciendo mi bienestar a diario.

Hoy recuerdo este maravilloso evento porque precisamente le estaba hablando a mi dragoncito del poder de la japa mala que tenía colgada al cuello durante todo su parto.

A los meses, falleció mi padre y me volvía a refugiar en mi japa mala para mantenerme funcionando como mamá y como profesional.

No es fácil ser vocera de empresas y ONG’s mientras sanas una herida tan grande. Sin embargo, el uso de la japa mala es una práctica que he incorporado en mi vida diaria que me es de gran ayuda y sostén.

Ser mamá no es fácil. Ser madre de dos menores de tres años no es fácil. Ser madre soltera no es fácil. Ser madre soltera, de dos menores de tres años, con el recién fallecimiento de tu padre, no es nada fácil. Si a ésto le añades, la pandemia y que soy empresaria dedicada a las comunicaciones, no es nada fácil.

Japa Mala Lalita Devi

Si tu cotidianidad es compleja como la mía, te recomiendo apoyarte de rituales diarios que vibren con tus valores, te ayuden a ganar perspectiva y te mantengan enfocada."

Puedes encontrar excelentes  herramientas de apoyo para tu Práctica Personal, haciendo Click aquí. El ChiwiEquipo agradece siempre tus comentarios y recomendaciones a todas nuestra comunidad de seres conscientes."

 

En colaboración con Melisa Mía Vargas, coach de comunicación efectiva. Conecta con ella en: Instagram + Twitter + LinkedIn


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